Pages - Menu

martes, 13 de agosto de 2013

Adiós Rosa!

Rosa ha sido nuestra señora de la limpieza durante los tres últimos años. Vino sola a España buscando trabajar, mientras dejaba en su casa a un amoroso marido y dos hijos de edades tempranas, pensando que aquí encontraría mejores condiciones laborales que en su país.

Pero nada más lejos de la realidad. Ha estado trabajando limpiando, fregando, haciendo de nana, nanita y todo lo que ha podido hacer, pero el no poder ver crecer a sus hijos y el no estar al lado de su marido, ha pesado mucho más que el ganar unos Euritos. 

Es enfermera titulada y al no encontrar trabajo en su país, Paraguay, de lo suyo, se enfrentó a señoras remilgadas y que la miraban por encima del hombro y que por supuesto nunca le daban las gracias por nada de lo que hacía. Además nunca, pero nunca, le daban ni un Euro de más ni un regalo u obsequio por navidad ni cumpleaños. Lo sé porque cada vez que le daba algo me decía que a ella, ninguna de las señoras para las que trabajaba, le daba nada.

Pero como he dicho, el amor de una família, está por encima de lo que puedas ganar. En un principio al cambio le salía muy rentable el trabajar en España, ya que al cambio le suponía poder vivir muy bien en su país e incluso poderse permitir enviar a su hijos a estudiar a una escuela bien y tener una "comadre" que cuidaba de su casa, marido e hijos. Para ellos era un auténtico lujo el poder tener unos eurillos para gastar. 

Salió en avión el domingo por la mañana, destino Roma, de allí escala en Londres y destino Paraguay, donde llegó el lunes por la tarde. Toda una vuelta para ahora estar abrazando a su familia. 

Entonces ahora no tenemos "chica de la limpieza", aunque llevo mucho tiempo buscando a alguien. Pero como la crisis aprieta hemos decidido que de momento no tendremos a nadie y que nos apañaremos nosotros mismos. Sólo dos veces al mes vendrá una chica para hacer algo a fondo, cocina, persianas, cristales, ... Y lo demás si no está tan limpio, sorry a quien no le guste. Haremos lo posible, pero sin obsesionarnos.

El amor de una madre no se cambia por nada, ni por dinero

No hay comentarios:

Publicar un comentario